El Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció que alcanzó un acuerdo a nivel técnico sobre la primera revisión del programa, pese a que varios analistas sostienen que el Gobierno no llegó a cumplir la meta de acumulación de reservas internacionales netas por US$ 8 mil millones, según estimaciones del Centro de Economía Política Argentina (CEPA). Aún falta la aprobación del Directorio, que se estima sea en las próximas semanas, para que el organismo internacional gire US$ 2 mil millones a las arcas del Banco Central (BCRA).
Así, la aprobación de la primera revisión del acuerdo con el FMI, pese a no llegar con lo pactado en materia de adquisición de divisas en el activo del BCRA y sin menciones oficiales respecto a si hubo o no un waiver de por medio, llegó en buen timing para el ministro de Economía Luis Caputo.
Por un lado, se da luego de que el equipo económico sobrepasara unos días de turbulencia financiera tras el desarme desprolijo de las LEFIs y que llevó a una volatilidad en las tasas de interés y tensiones cambiarias. El sacudón en los mercados pareciera quedar atrás por el momento, aunque las tasas quedaron altas y aún resta saber qué pasara la semana que viene en la licitación del Tesoro. “La combinación de tasas reales altas y el dólar yendo a testear la banda superior en el marco del proceso electoral, parece un escenario tan probable como terrible”, alertó Haroldo Montagu, economista jefe de la consultora Vectorial.
Por otro lado, el desembolso por US$ 2 mil millones le da aire al tándem Caputo-Bausili, con esos dólares sumados a los préstamos del BID de esta semana por otros US$ 1.200 millones inyectarán liquidez a las arcas del Central, que contará con mayor respaldo frente a las presiones cambiarias. El equipo económico consigue algo de margen para pasar el invierno, ya sin los dólares del agro y una demanda de divisas para atesoramiento de ahorristas que podría ver incrementada a medida que se acerquen las fechas de las elecciones legislativas de octubre, entre tantas canillas de fuga de dólares como las importaciones, el turismo y la fuga de capitales.
“Las reservas del BCRA comienzan a crecer mayormente por endeudamiento con organismos y en menor damiento con organismos y en menor medida por compras que realiza el Tesoro por fuera del mercado de cambios. El proceso electoral, sin embargo, amenaza la tensa calma. Esto obliga al Tesoro a continuar comprando, lo que inevitablemente pondrá más presión alcista el tipo de cambio. La banda superior actualmente se encuentra en $ 1.448”, señaló Vectorial en un informe, donde también estimó que actualmente las reservas metas se encuentran en un terreno en activo en el orden de los US$ 5 mil millones.
“Es probable que el Gobierno intente extender la fecha de corte para la siguiente revisión de las metas del programa, buscando ganar tiempo para acumular reservas. Esto permitiría suspender las compras de divisas tras el desembolso del FMI y hasta después del ciclo electoral, lo que también contribuiría a contener las tensiones cambiarias en ese ínterin”, agregaron desde Suramericana.