Murió Raúl Fernández, histórico periodista de las transmisiones radiales de fútbol

Raúl Fernández, una de las voces más reconocidas de las transmisiones radiales de fútbol, en las que aportaba información y resultados desde su lugar en los estudios de radio, falleció esta madrugada a los 85 años. Trabajó con reconocidas figuras históricas del relato, como Fioravanti y José María Muñoz, y hasta hace algunos años se desempeñaba en las transmisiones de Radio La Red.

Además de Fioravanti y Muñoz, Fernández también tiró paredes con otras personalidades de la transmisión futbolística: Enrique Macaya Márquez, Fernando Niembro, Julio Ricardo, Walter Saavedra y Gustavo López. Conocía la radio como sólo puede hacerlo alguien que comenzó a trabajar a los 21 años y no se despegó más. Con relatores y comentaristas lograba, desde ese «pulmón» que era el micrófono de estudios centrales, un ida y vuelta que aportaba dinamismo en los programas.

«Antes vos anunciabas un gol, que si vos no lo hacías, nadie sabía, porque no se televisaban todos los partidos», le comentó a Radio Nacional en diciembre de 2021. Lo suyo también era el resumen de todos los resultados y las novedades a la noche, al final de la jornada futbolera, sintetizadas en su latiguillo: «¡Hola, puntero!».

«Hoy es un día triste para la radio, para el ascenso. Nos ha dejado Raúl Fernández. Su duende siempre andará por ahí con su: ¡Hola puntero! ¿Quién no ha escuchado esa frase?. Desde aquí un saludo afectuoso a la familia y amigos. Todos los recordaremos con una sonrisa y la alegría de Raúl», informó este sábado Sergio Atencio desde los micrófonos de La Red, en medio de su relato del partido Chaco por Ever-Almirante Brown.

Uno de los hijos de Fernández dio la noticia en su cuenta de la red social X. «Se fue en paz, tranquilo», escribió, agradeciendo los mensajes recibidos y destacando los más de 60 años de carrera de su padre.

Fernández se codeaba en el imaginario del viejo amante futbolero con otras leyendas: Juan José Lujambio, el maestro, y Alberto Rual, su antecesor, que acuñó el «¡Atento, Fioravanti!».

A pesar de su largo recorrido en los estudios central, se quedó con una espina clavada. «“Para mí, el fútbol comenzó con Fioravanti, José María Muñoz, pero hay alguien a quien nadie lo va a poder superar de acá a la eternidad, Víctor Hugo Morales«, aseguró hace dos años y medio. «Tuve muchas satisfacciones, pero tuve una sola cosa que no pude cumplir, laburé con todos, pero me queda la materia pendiente de trabajar con Víctor Hugo», lamentó.

Un sinfín de colegas y compañeros de trabajo expresaron su tristeza, con mensajes en redes sociales en las que resaltaron la generosidad y el compañerismo del periodista, que era un reconocido hincha de Huracán.

«Raúl querido. Gracias por haberme honrado con tu amistad», escribió Cali Fidalgo. «Hasta siempre, Maestro. Raúl Fernández fue un hombre digno que honró la profesión y está en la galería ilustre de los que hicieron de la radio el medio más maravilloso», lo despidió, por su lado, el relator Leo Gentili.

Otro que lo despidió fue Eduardo Caimi. «Dicen x ahí que se rajó pal otro barrio el gran Raúl Fernández. Emblema de la radio. Cálido, amable. Con su cadencia, reinventó ese rol hermoso del estudios centrales en una transmi. Les suena ‘Holaaa punteroooo’. Era tan fana quemero que se fue con el Flaco. Abrazo grande Raúl», tuiteó «El Polaco», relator de Radio Mitre, que aludió al fallecimiento de César Luis Menotti, DT del plantel de Huracán que salió campeón del Metropolitano 1973.

Raúl Fernández con el equipo de De una, en La Red, donde trabajó hasta hace poco. Foto FB La Red

Con 60 años fatigando los micrófonos radiales, recordado por las discusiones -siempre amables- con Fernando Niembro en «Las voces del fútbol» en los mediodías de Radio Libertad, Fernández fue reconocido en julio de 2019 como Personalidad Destacada por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. En esa oportunidad lo definieron como el creador del «magazine deportivo del mediodía», que mezclaba entretenimiento con las últimas novedades deportivas.

También fue amigo y secretario de Juan Carlos Altavista. «Yo le manejaba algunas cosas, pero después le dije ‘Mirá, Juan Carlos, yo quiero seguir de periodista deportivo'», contó sobre Minguito.

«¿Sabés por qué elegí estudios centrales? Yo hice mucho tiempo campo de juego con Yiyo Arangio… ¿Sabés por qué elegí estudios centrales? Porque en el anuncio yo sabía que le estaba dando alegría a la gente», rememoró sobre sus inicios.

Y daba su secreto: «Yo decía ‘Gol de Midland’, y yo soñaba y pensaba que allá en Libertad, partido de Merlo, mucha gente se estaba engolosinando y alegrándose por mi anuncio. De ahí me parecía de gran importancia los estudios centrales, compartido con estadísticas y algunas anécdotas».

Dueño de un estilo sobrio y mesurado, abundante en datos que le aportaban su larga experiencia, su latiguillo «¡Hola, puntero!» ahora sólo será un recuerdo de tantas tardes radiales de fútbol.